Las fundas dentales, también conocidas como coronas dentales, son prótesis fijas que se cementan sobre un diente dañado para restaurarlo y protegerlo. Son una solución eficaz para una amplia gama de problemas dentales, desde caries extensas hasta dientes fracturados o descoloridos.
Funciones de las fundas dentales:
Las sonrisas no solo iluminan el rostro, sino que también son una ventana a la salud bucal. Un diente dañado puede afectar no solo la estética, sino también la función masticatoria y la salud general de la boca. En estos casos, una funda dental se convierte en una poderosa herramienta para restaurar la salud y la belleza de tu sonrisa.
A continuación te mencionamos algunas de sus funciones:
- Protección: Las coronas dentales protegen los dientes dañados de la caries, el desgaste y las fracturas. Cubren la superficie del diente y lo aíslan de las bacterias y otros agentes dañinos.
- Restauración: Sirven para restaurar la forma, el tamaño y la función de un diente dañado. Esto permite al paciente masticar y hablar con normalidad, y también mejora la estética de la sonrisa.
- Soporte: Una funda dental puede usarse para soportar un puente o un implante dentales. Esto ayuda a reemplazar los dientes perdidos y a restaurar la función masticatoria.
- Estética: Pueden mejorar la apariencia de un diente descolorido, manchado o malformado. Se pueden fabricar en una variedad de colores y materiales para que coincidan con los dientes naturales del paciente
Tipos de fundas dentales:
Al seleccionar el tipo de funda dental ideal, se deben considerar factores como la ubicación del diente, la extensión del daño, la estética deseada y el presupuesto del paciente.
Las fundas dentales no son una solución única, sino que existen diferentes tipos que se adaptan a las necesidades específicas de cada paciente. A continuación, exploraremos las opciones disponibles:
Fundas de metal: Más resistentes y duraderas, pero también las menos estéticas. Se suelen usar en las muelas, donde la estética es menos importante.
Fundas de porcelana: Son más estéticas que las de metal, pero menos resistentes. Se suelen usar en los dientes frontales, donde la estética es más relevante.
Fundas de zirconio: Una opción intermedia entre las de metal y las de porcelana. Son fuertes y estéticas, pero también más caras.
Fundas provisionales: Son coronas temporales que se usan mientras se fabrica la funda definitiva. Se suelen hacer de acrílico o resina.
Procedimiento y Dolor
El procedimiento para colocar una funda dental generalmente implica varias etapas, incluida la preparación del diente, la toma de medidas y la colocación de la corona. Se utiliza anestesia local para minimizar cualquier molestia durante el proceso.
Aunque es posible experimentar molestias temporales después del procedimiento, estas suelen desaparecer en unas pocas semanas. Sin embargo, si el dolor persiste, es importante consultar a tu odontólogo para evaluar cualquier problema potencial.
En resumen, las fundas dentales desempeñan un papel vital en la restauración y protección de los dientes dañados, proporcionando una solución estética y funcional para una variedad de problemas dentales.
